La cláusula cero en un contrato hipotecario
Existen diversas fórmulas para establecer una cláusula suelo. A la falta de transparencia que supone la inclusión de este tipo de cláusulas, podemos añadir el hecho de esconderlas aún más, a través de una redacción engañosa. Condicionantes específicos que parecen buscar que el cliente no se percate de que tiene cláusula suelo. Este es el caso de la cláusula cero. Un concepto y regulación incluido por algunos bancos en ciertos contratos hipotecarios, y que pretende limitar los derechos de los consumidores. Lo explicamos.
La cláusula suelo como concepto general
Básicamente, consiste en limitar la cantidad a la baja que deben pagar los hipotecados mensualmente. Imaginemos un ciudadano que quiere comprarse una casa. Va al banco y le conceden una hipoteca, con un coste variable en función del Euribor y los intereses que marque la entidad. El Euribor, u otros valores que se estimen para el cálculo del coste de tu hipoteca, son variables. Por lo tanto, habrá meses que suba, y tendrás que pagar más. Y meses que baje y ¿pagarás menos? Si tienes cláusula suelo, no. ¿Te parece injusto?
Pues bien, el banco ha incluido en ese contrato una cláusula para que, aunque bajen, tú no pagues menos. ¿Sorprendido? Pues ojo porque esto puede estar ocurriendo en tu contrato hipotecario, por lo que puede que hayas pagado, o estés pagando, de más al banco.
La cláusula cero en particular
La cláusula cero tiene relación con el concepto anterior. Marca límites a lo que tienes que pagar al banco por tu hipoteca (cuando es a la baja). Y, además, falta al principio de transparencia que exigen los jueces, tras varias sentencias en contra de la utilización de la cláusula suelo.
En este caso en concreto, el banco establece que un cliente no puede pagar intereses que den como resultado un 0%, o menos de ello. Independientemente de que la suma entre diferencial y Euribor sea negativa.
Revisa tu contrato hipotecario y ponlo en manos de profesionales, para que podamos dictaminar si se ha cometido alguna irregularidad que te permita reclamar cualquier cantidad que el banco te haya cobrado de más.